Este mes he estado trabajando intensamente en uno de los encargos más especiales y costosos que he realizado. Tal vez por eso, es una de las piezas en las que he puesto más ilusión y creo que eso se refleja en el resultado.
Sin que pudiera imaginarlo siquiera, me llamaron para hacer un bouquet de novia de ganchillo, me quedé petrificada, porque nunca había hecho nada parecido, ilusa de mi, pensé que sería cosa de una semana, pero estaba muy equivocada.
Lo primero que hice fue informarme de los gustos de la novia y de cómo iba a ir vestida, colores champán y una romántica falda con varias capas de tul y accesorios de color rosa palo, primera etapa superada.
Luego le pregunté que idea tenía y me enseñó un bouquet que había visto en el blog de According to Matt, parece fácil, pero os puedo garantizar que no lo es en absoluto! Por suerte, de ese blog pude sacar alguna idea que me ayudó a la hora de elaborar el ramo con una semiesfera de poliexpán, pero no daba demasiadas pistas del resto, así que tuve que tirar de imaginación y de la ayuda inestimable de algún duende que me solucionó varios problemas de la carcasa.
Luego le pregunté que idea tenía y me enseñó un bouquet que había visto en el blog de According to Matt, parece fácil, pero os puedo garantizar que no lo es en absoluto! Por suerte, de ese blog pude sacar alguna idea que me ayudó a la hora de elaborar el ramo con una semiesfera de poliexpán, pero no daba demasiadas pistas del resto, así que tuve que tirar de imaginación y de la ayuda inestimable de algún duende que me solucionó varios problemas de la carcasa.
Una vez tuve la estructura, me tocó hacer unas cuantas flores de ganchillo, escogí un hilo de 5 mm porque quería que fuera muy romántico, y me pareció que lo conseguiría con unas flores más pequeñas, eso sí, tuve que hacer 130 flores, entre las de color champán, las rosas y las de color vino, que vinieron a poner un toque de color al ramo. Una vez acabadas, las estuve cosiendo todas a una malla de tela que cubría la semiesfera y le coloqué unas perlitas.
Como la falda de la novia era de tul, decidí que los adornos serían de ese material, pero le añadí una cinta de encaje que le dio un toque vintage que me encanta. El pomo del ramo, lo forré con cinta de raso y utilicé el mismo acabado que en el blog de referencia, que me parece de lo más limpio y pulido que he visto.
Aún faltaba un último pero crucial detalle, el cinturón de la novia era de una seda de organza rosa palo preciosa así que decidí incorporar un trocito a mi ramo ( su ramo, en realidad) y corté una cinta que coloqué como lazo alrededor.
El resultado es el que os muestro, no tengo duda que será uno de los ramos más originales que haya lucido una novia y lo mejor de todo es que es único y le durará muuuuucho tiempo.
Personal, único y eterno, como una promesa nupcial.
Personal, único y eterno, como una promesa nupcial.
